Ya llega el final de curso y con ello la esperada excursión final. Este año nos hemos ido a un paraje espectacular muy cerquita de nuestros pueblos: a las Merindades.
Primero llegamos a Tobera, un pueblo cuya existencia se conoce desde
principios del siglo XI (1000 d.C.) y en el 1489 pasó a ser un barrio de Frías. En nuestra primera parada vimos un puente medieval que cruza el río Molinar, el cual perteneció a la calzada romana que
pasaba por este lugar. Desde ese lugar, comenzamos una ruta llamada el “Paseo del Molinar”, que nos llevó por los distintos
miradores y cascadas del río Molinar que atraviesa los montes de los Obarenes.
Estos saltos de agua se han aprovechado desde hace siglos como molinos, batanes
o fábrica de papel (siglo XII – 1100 d.C.) considerada una de las más antiguas
de España, hasta la actual central hidroeléctrica que se encuentra en las
cercanías.
Después fuimos a Frías, un pueblo donde las casas están
adaptadas a la pendiente de la roca sobre la que están construidas. En sus
estrechas fachadas aparece piedra de toba (característica de la zona).
Igualmente hay casas colgadas de la roca. La ciudad de Frías fue declarada
Bien de Interés Cultural en 2005 ya que constituye un modelo de ciudad medieval
y defensiva levantada en lo alto de un cerro conocido como La Muela.
En este lugar idílico, visitamos su castillo donde pudimos pasa por su puente levadizo, su paseo de guardia, sus habitaciones e, incluso, subir a la torre del homenaje donde nos hicimos idea de lo importante que fue este castillo por su situación estratégica, ¡vaya vistas que tenían!
Además, dimos un paseo y nos acercamos al puente medieval de la villa. Desde donde teníamos unas maravillosas vistas de Frías.
Finalmente, para terminar el día, fuimos a ver la cascada de Tobalina.
Para ver más imágenes de la excursión, pinchad aquí.
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